El sábado pasado participe en la comida organizada por Sergio y Javier, nos reunimos un grupo de gente que se dedica al mundo de la empresa en el mundo de la tecnología e internet. Me gusto mucho el concepto que Sergio compartió de la burbuja emprendedora. Está de moda, ahora lo de ser emprendedor mola, y lo de tener una Start-up mola todavía mas.
Quizás son los años de experiencia pero Sergio anticipa, con buen criterio, que dentro de poco veremos un plan nacional de emprendedores o una secretaría de estado, o vaya usted a saber. Seguro que al final habrá muchas ayudas públicas a las «start-ups» o similares que se llevarán los de siempre y como siempre.
Parte de la comida la dedicamos a compartir cuales son las cosas que el gobierno debería hacer para ayudar al desarrollo del pais. Muchas de las cosas mencionadas no son nuevas, (no por eso son menos importantes) como el ajustar en las empresas el pago del IVA con el cobro de las facturas, la simplificación de trámites, etc. Otras son mas novedosas pero les dejaré a ellos que las cuenten cuando lo estimen oportuno.
A mi me gustaría centrarme en dos que son las que en mi opinión son mas relevantes. La primera tampoco es tan nueva, es, como dicen en Castilla: «El undécimo: No estorbar«. A mi me bastaría con que le gobierno no estorbara.
La segunda es mas difícil de conseguir e incluso de explicar, pero lo voy a intentar:
Existe un modelo de startup (hiper simplificado) o emprendedor que es el de:
- Tienes una idea,
- Te pones a currar sin sueldo ni nada dejándolo todo en el proyecto
- Consigues un «angel investor»,
- Empieza la carrera por crecer y hacer tu proyecto global,
- Tu «éxito» llega cuando vendes tu participación o sales a bolsa y te haces millonario.
Este modelo de startup supone que cualquier cosa que no sea hacerse millonario es un fracaso (y entiendo que los inversores lo puedan ver así, yo como inversor también lo vería así). Pero este modelo de éxito tiene tres problemas reales y muy serios:
- El esperanza matemática de tu inversión, resultado de multiplicar el ROI por la probabilidad de que pase, es peor que la de la lotería primitiva. El éxito así definido llega en muy pocos casos.
- En España ese modelo deja la oportunidad de emprender a la gente con capacidad para estar unos años sin ingresos, y yo creo que la mayoría de los potenciales emprendedores no pueden llegar. El coste personal de ese modelo es demasiado alto, y en muchos casos es imposible.
- Desprecia la mayoría de proyectos empresariales, que no son tan así, que muchas veces mantienen algunas pocas familias, y que por cierto son los que generan la mayoría del empleo y pagan la mayoría de los impuestos. Ahora está de moda decir que tu proyecto es un proyecto de «auto-empleo», y se dice con un cierto desprecio que a mi me enciende.