Los que llevamos años dedicados a la innovación hemos sufrido siempre el síndrome de la solución de los grandes, aquello de: «Nunca han despedido a nadie por contratar a ______» (rellena con el nombre de tu compañía favorita, IBM, SAP, Accenture, Microsoft, etc.).
La protección ante el fallo de un proyecto del que tomaba la decisión era muy fácil: «Si ________ no pudo hacerlo bien, imagínate una PYME».
Ayer me enteré del primer equipo de dirección despedido por haber gestionado mal un proyecto de implantación de SAP. Su empresa estuvo dos meses sin facturar y varios sin sistema de gestión.
No es novedoso que los proyectos de implantación de ERPs fallen. Yo recuerdo una reunión con el dueño de una conservera que acababa de llegar de una reunión con el banco a la que se había llevado al socio de la consultora, porque necesitaba financiación, no había podido facturar en 4 meses. En dos de las últimas visitas que he hecho las dos empresas estaban sin poder pagar proveedores por culpa de la implantación del ERP.
La novedad para mi es que el mercado está empezando a entender que el tamaño y la imagen no son excusa. Que las soluciones probadas, no están tan probadas.
Muchas veces las PYMES sufrimos el hecho de que el cliente se siente mas seguro contratando una grande. Y yo entiendo esa percepción, pero es solo eso, una percepción.
Respeto a las grandes empresas, seguramente lo son porque saben hacer muy bien su trabajo, pero las PYMES también sabemos hacerlo.
Así que si estas pensando contratar a una grande hazlo porque creas en ellos, pero ya no puedes decir aquello de «Nunca despidieron a nadie por haber contratado a _____»